El mes de diciembre completo está lleno de fiestas, mucha comida, mucho alcohol. Los días más abundantes son Navidad y Año nuevo en asuntos de consumo de alcohol y pasar los límites.
La palabra resaca, se refiere a los síntomas por excesos o embriaguez alcohólica, pero también al resultado de los excesos en general de todo este tiempo. Fatiga, dolor estomacal, dolores de cabeza, vómitos, mareos, de forma aguda. Las libras de más, la inflamación general, falta de enfoque o concentración, desgana, ansiedad por azúcar, remordimiento, como resultado final de toda una temporada de mal dormir, de mal comer, poco ejercicio o nada y de consumir alcohol excesivamente.
Si estás en esa situación aunque no sea extrema y quieres reponerte pronto eliminando toxinas más rápido. Si quieres proteger un poco más tus órganos y en especial el hígado, aquí te dejo unos tips prácticos:
- Evita consumir alcohol por varios días, los más que puedas. No intentes tomar más alcohol como remedio. Eso solo alargará la reacción.
- Evita el acetaminofén. Le dará más trabajo a tu hígado, además de agotar el glutatión.
- Hidrátate: antes de dormir, toma un vaso grande de agua con una pizca de sal rosada y un poco de limón o vinagra de manzana. Al levantarte sigue un sistema para mantener la ingesta de líquido que reponga los electrolitos. Considera el agua de coco.
- Infusión de Jengibre o tintura de jengibre: te ayuda con las náuseas y par asentar el estómago.
- Tintura de Boldo: excelente para desintoxicar el hígado y mejorar la digestión.
- Ejercicio físico: si puedes soportarlo, una sesión corta de ejercicio de alta intensidad podría ayudarle a sudar algunas de las toxinas. Asegúrese de beber suficiente agua para evitar deshidratarse más. Si no puedes con alta intensidad, al menos haz una caminata.
- Caldo de huesos: te hidrata, repone minerales y es excelente tónico para tu estómago. Su aporte de grasas también te ayuda a recuperar y reparar.
- Jugo verde especial: pepino, apio, jengibre + cristal de sábila (aloe vera). 1-2 vasos en las mañanas.
- Jugo de zanahoria, en extractor prensado en frío: 4-6 vasos de 8 onzas por 3 – 4 días.
Suplementos:
- Milk Thistle o Cardo lechero: contiene silimarina y silibina, que son antioxidantes conocidos por ayudar a proteger al hígado del daño causado por las toxinas. No sólo se ha descubierto que la silimarina aumenta el glutatión, sino que también ayuda a regenerar las células del hígado. Puedes tomar 1-2 capsulas al día.
- Vitamina C: el alcohol puede agotar la vitamina C del cuerpo, la cual es importante para reducir el estrés oxidativo inducido en el hígado por el alcohol.
- N-Acetilcisteína (NAC) aumenta el glutatión y reduce la toxicidad causada por el acetaldehído5 que ocasiona muchos de los síntomas de la resaca. Unos 600 mg diarios pueden ser útiles.
- Vitaminas B: el alcohol agota las vitaminas B, en especial la B1 y B6. Justamente la vitamina B6 puede disminuir los síntomas de resaca y la tiamina o B1 colabora con el NAC para mejorar su acción.
- Magnesio: es otro nutriente que se agota con el alcohol. Además, el magnesio tiene propiedades antiinflamatorias que podrían ayudar a reducir algunos de los síntomas de la resaca. Alimentos ricos en magnesio: aguacates, espinacas, nuez de brazil, almendras, frijoles negros.
- Enzymas digestivas: si tu abuso fue de alimentos, las enzymas, además de ayudarte a digerir mejor, son excelentes como antiinflamatorios.
- Agua de Quinton: 2 ampollas en la mañana y 2 en la tarde. Mejor la versión Isotonic para recuperarte.
Si tienes acceso a sueroterapias, las hidratantes, con vitaminas del complejo B y vitamina C pueden ser un excelente rescate. Hay opciones con NAC que también pueden acelerar el proceso.
