Disfruto todas las estaciones, sin embargo te confieso que el otoño tiene una magia especial para mi. Los colores, del otoño no tienen comparación ¡Me encantan!
Cuando aprendí Medicina Tradicional China empecé a entender más de las estaciones y como nos influyen y de que manera podemos alinearnos con ellas y sacarles más partido. Ahora que estoy más tiempo en el norte, disfruto el drama de los cambios de manera especial, aunque los cambios energéticos se dan en cualquier lugar, incluso en lugares tropicales como mi isla de nacimiento.
Con el equinoccio de otoño todo empieza a aquietarse. Con la caída de las temperaturas, empujan la energía hacia abajo. Se reduce el ritmo que nos mueve en el verano. Cambiamos suavemente a mayor lentitud, estar más adentro, preparar la llegada del invierno.
La Medicina Tradicional China asocia el otoño con el Reino del Metal. En este reino reside el recuerdo, la nostalgia, los antepasados, lo vivido, las añoranzas. No es de extrañar que recordemos más ciertas situaciones vividas, que tengamos más añoranzas en incluso puede asomar una leve melancolía.
El color correspondiente con la estación es el blanco. En el se resumen todos los colores. Así como el blanco, el metal representa todas las potencialidades de movimiento del hombre. Se rescata el recuerdo de todos los demás reinos.
El órgano que se corresponde con el reino del metal es el pulmón y la entraña asociada es el intestino grueso. Este vínculo tan estrecho entre órgano y entraña nos lleva a que en muchos problemas pulmonares, tengamos que revisar cómo está la función de la entraña; intestino grueso, de eliminar lo impuro.
Muchas veces, trabajando el intestino grueso para que se elimine lo impuro favorecemos el proceso respiratorio / proceso pulmonar, debido a ese vínculo entre el órgano y la entraña. De la misma manera, respirando adecuadamente podemos aliviar, incluso solventar problemas del tránsito intestinal.
Para la tradición, el pulmón es “el maestro de la energía”, es el que da vitalidad al organismo, a toda la estructura. Esa vitalidad que nos permite continuar y avanzar. Enfatizar en la respiración, trabajar con ejercicios respiratorios es fundamental en este tiempo para sintonizar la energía general de nuestro cuerpo. Rescatar las técnicas respiratorias adecuadas sería una forma de prevenir enfermar en este tiempo. Si la respiración se regula adecuadamente podemos controlar, además, estados de angustia, de ansiedad, de miedo o de cualquier otro tipo de emoción.
“Respirar es un milagro constante. Respirar es cómo resucitar todos los días”
ALGUNAS SUGERENCIAS PARTICULARES
Alimentación
Lo más importante es comer alimentos de temporada y los propios de cada zona. Los alimentos de otoño deben humedecer y limpiar los pulmones, apoyar el sistema digestivo. Maduran frutas que marcan el cambio de ciclo, algunas de temporada muy corta, típicamente otoñales.
Para tratar la sequedad en otoño se puede probar algunos de los alimentos más humectantes, tales como: espinacas, peras, manzanas, mijo, algas marinas, setas, almendras, cacaos, semillas de sésamo, tofu. Los alimentos y plantas con sabor picante son importantes para los pulmones.
Las sopas son buenas en otoño por aumentar el tiempo de cocción los ingredientes y son más fáciles de digerir. Las sopas espesas y los guisos acumulan reservas de energía para los meses más fríos. Se debe cocer al vapor, a temperatura baja durante períodos largos, usando poca cantidad de sal.
Alíate de los alimentos fermentados: chucrut, miso, kombucha, o kefir. Apoyan la función inmunológica, son prebióticos que tus intestinos siempre agradecen.
Recuerda los alimentos blancos: coliflor, cebollas blancas, setas, pimienta blanca, sésamo o ajonjolí blancos, rábanos…Y dale protagonismo al sabor picante.
Consume más vitamina C
Incrementa el consumo de alimentos ricos en vitamina C, ya que esta es la mejor aliada para reforzar tu sistema inmunológico. Los alimentos que son ricos en vitamina C son el brócoli, espinaca, repollo, coliflor y frutas como el kiwi, melón, papaya, piña o las naranjas. Si eliges las frutas, úsalas con moderación y enteras, no en jugo.
La vitamina C, mejora la absorción de hierro y por ende lucha contra los radicales libres que provocan el envejecimiento celular prematuro, el cual puede influir en algunas enfermedades. Si eres de las personas vulnerables, tal vez recurrir a suplementación extra de vitamina C es una buena idea.
¿Conoces la Vitamina C nuestra? Aquí te la presento:
Aprovecha los días soleados
Baños de sol ocasionales permitirán que la generación de endorfinas no disminuya, lo cual te permitirá mantener un estado anímico bueno. El sol es la principal fuente para sintetizar de manera natural la vitamina D. En los días con sol, aprovecha para pasear bajo el sol por algunos minutos. Toma aire puro y fresco.
Respira profundo
Mejora el sistema inmunológico, aumenta tu vitalidad, mejora tu ventilación interior y es excelente para los pulmones.
Voy a enseñarte varios ejercicios en estos días, mientras puedes hacer uno muy sencillo que consiste en respirar por el abdomen tomando todo el aire que puedas y luego dejarlo salir conscientemente haciendo una exhalación un poco más larga que la inspiración.
Mantén la hidratación
Toma líquidos, agua a temperatura ambiente para ayudar a tu cuerpo a mantenerse hidratado. Una buena manera son las infusiones, además de calentarte, te hidratan y aportan nutrientes. Mi favorita en este tiempo es la de jenjibre, que además de mejorar mi respiración, limpiar mis vías aéreas, tiene un sabor picantón exquisito que va fantástico con el otoño.
Duerme suficiente.
El sueño es regenerativo y mantiene el sistema inmunológico fuerte. Esta época en la que el sol se acuesta más temprano, te invita a irte igualmente más pronto a la cama. Algunas personas pueden sufrir de “astenia otoñal”, una sensación de cansacio mayor a lo habitual por una dificultad adaptativa a los cambios de temperatura y luz. Se mejora con más horas de sueño. En la transición hacia el invierno, mantener el sueño profundo y un poco más largo apoyará tus hormonas y todo el balance interno de tu cuerpo. Inicia esa transición con una ducha tibia, una rica tasa de infusión relajante debajo de las cobijas leyendo un buen libro.
Remueve, reorganiza y limpia.
Recordando el ejemplo de la naturaleza que se desprende de su follaje, el otoño es el momento perfecto para dejar ir aquello que ya no nos sirve, lo viejo, para hacer sitio a lo nuevo. Tanto en el plano físico como en el emocional. Es una época ideal para hacer planes detox, hacer sopas depurativas, mejorar la calidad de tus ingestas. También para renovar tu interior, salir de resentimientos, de emociones estancadas que no te dejan fluir hacia lo óptimo.
También dale importancia a ventilar tu hogar, renovar el aire, evitar la acumulación de parásitos, hongos, bacterias oportunistas que contaminan tus espacios. Renovar el aire evitará también alergias propias de humedad u ácaro que pueda existir allí.
¿Has contemplado la opción de usar un buen purificador de aire? Tengo uno fantástico que recomendarte. El que uso en mi casa y mi oficina con el sistema Hipa. Si te interesa escríbeme privado y te envío las referencias.
Espero que puedas disfrutar tanto como yo de este maravilloso tiempo que nos dirige al interior. Un tiempo de cosecha, de recogida y de abundancia.
Un abrazo REAL,
Raquelina